Intervención como irrupción, mirada detenida, pausa, silencio, escucha y sensibilidad con lo que el espacio quiso decirme, darme en acciones y afectos.
De este modo quise construir estas breves intervenciones en estos dos espacios elegidos en esta cálida verde ciudad de Pamplona que me ha recibido con una lluvia de memorias, murmullos, gritos, cantos, danzas, secretos y sonoridades que respiro a conocidas o desconocidas desde mi historia como mujer, artista, bailarina, actriz, educadora, ciudadana, urbana, animal, río, mar, llanura, montaña, cielo estrellado y acentos acentos que se conectan en miradas donde somos humanos creadores sentidores…
Amalia Herrera
CoLaboratorio 2017/ Festival de DNA / Centro Huarte
Pamplona, España
Soto de las lavanderas. Acción en el Río Arga.
Al lado del río/ lavanderas
El trabajo de las lavanderas fue uno de los más habituales entre las mujeres durante el S. XIX y principios del S. XX. A lo largo de los diversos lavaderos situados a orillas del río Arga, las mujeres en muchos casos con ayuda de sus hijas pequeñas, lavaban las ropas arrodilladas sobre un saco vacío doblado dentro de una caja de sardinas y luego las colgaban en los tendederos.
(Texto para la acción)
De esos días siempre recuerdo primero las vueltas en un bote alrededor de una pequeña isla de plantas. Cada poco tiempo las cambiaban; pero allí las plantas no se llevaban bien. Entonces me resignaba a esperar las palabras que me vendrían de aquel mundo, casi mudo, de espaldas a mí y deslizándose. El agua es igual en todas partes y yo debo cultivar mis recuerdos en cualquier agua del mundo.”